Los datos del consumo de Gas Licuado de Petróleo (GLP) correspondientes al primer semestre de 2019 volvieron a arrojar resultados negativos: es el más bajo de los últimos diez años.
Si analizamos la misma situación por trimestres, podemos observar que en el segundo de este año se evidenciaba un leve repunte de alrededor de un 10 por ciento respecto del mismo período de 2018. Esto ponía de manifiesto una cierta estabilización de la caída que estábamos experimentando desde el año pasado.
En el contexto antes mencionado, nos era posible seguir sosteniendo el pronóstico, aquí anunciado, de una producción que apenas superaría los 700 millones de aerosoles. Sin embargo, ante las nuevas condiciones económicas y financieras de Argentina, podemos presumir que la fabricación estará debajo de ese número de unidades.
En este análisis también debemos destacar que nuevamente observamos una disparidad en el consumo de GLP. En este caso, han sido las empresas medianas y pequeñas las que han experimentado una fuerte caída mientras que los lideres del mercado han mantenido prácticamente el consumo, con un leve retroceso.