Las idas y vueltas de una gestión exitosa
Las idas y vueltas de una gestión exitosa

Por José Luis Zito, vicepresidente de UADA

Nuestra relación con la Secretaría de Energía empezó hace 17 años. En aquel entonces, el Ing. Elbio Bressan, reconocido instalador, me comentó que dicho organismo tenía decidido llevar a cabo inspecciones en las fábricas de aerosoles, desde los depósitos hasta los puntos de venta. La premisa era simple: todo lo que tuviera vinculación con el gas licuado de petróleo debía pasar por el visto bueno de la Secretaría. Según me contó Bressan, la decisión del por entonces director de Gas Licuado de Petróleo (GLP), de apellido Martínez, se dio en el contexto de su enojo porque el presidente de CADEA de ese momento no lo había querido recibir.

A partir de ese comentario, me dispuse a conversar con varios colegas con la intención de comentar lo dicho por el Ing. Bressan. Así fue que se organizó una reunión en el subsuelo de un hotel céntrico de la que participaron aerosolistas, instaladores y el director Martínez. Durante ese encuentro, tuve un ataque de inspiración y sostuve que una vez que se inyectaba el gas en el aerosol este se transformaba en otro producto distinto por lo que, a partir de ese punto, debía quedar excluido del control de la Secretaría de Energía.

Ante nuestra propuesta, Martínez hizo silencio, se quedó pensando por un momento y reaccionó. Por primera vez, nos instó a confeccionar un proyecto de norma específico para plantas de aerosoles que contemplara las particularidades de estas. Ese trabajo quedó en manos del Ing. Bressan quien elaboró una primera versión que posteriormente fue revisada por Ing. Fabián Soto, en representación técnica de los aerosolistas.

Este primer borrador tuvo varias idas y vueltas. Se desarrollaron múltiples reuniones de trabajo en las que participaron importantes referentes de nuestro mercado como Rubén Barbone, Enrique Torres, Juan Selvatici, Andrés Macri y quien escribe, entre otros. Asimismo, también contamos con el invaluable aporte de los ingenieros Alberto Osso, Daniel Vázquez y Felipe Russo, en representación de la Dirección de GLP, quienes, a pesar de estas jubilados, continúan, en la actualidad, siendo hombres de consulta de UADA.

A lo largo de los años, y a pesar del cambio de los funcionarios del área, el proyecto de norma siempre se mantuvo presente. Estuvo incluida en el temario de los distintos encuentros con los directores de GLP con los que tuvimos la oportunidad de entrevistarnos. En cada uno de esos pasos, UADA cumplió la tarea de informar a través de su newsletter, El Aerosólogo News.

Tal fue la presencia de esta norma en las gestiones de UADA que muchos de nuestros lectores, que participaron del Congreso Latinoamericano del Aerosol que se llevó a cabo en Argentina en 2014, recordarán que hicimos entrega de esta y muchos tomaron partes de su texto para aplicar en sus países.

Lo que siguió fue un proceso de reducción de lo escrito por sugerencia de la ex directora de GLP, Ing. Adriana Serrani. En una reunión que mantuvimos con dicha funcionaria nos dijo que no eran necesarios tantos papeles ya que las instalaciones y las medidas de seguridad eran las mismas para cualquier planta que maneje GLP. Por esa razón, solo bastaba con que se presente una nota que aclare la incumbencia del control de la Secretaría.

La propuesta de Serrani nos cambió por completo la perspectiva: ya no era necesario elaborar una norma compleja sino simplemente aclarar lo que habíamos planteado hace 17 años, que las inspecciones de la Dirección de GLP solo pueden llegar hasta el pico de inyección de gas y zona de fuegos abiertos ya que el resto de las instalaciones ya son escrutadas por otros organismos estatales tales como ANMAT, SENASA, Ministerio de Medio Ambiente, los seguros, y otros que forman parte del listado de 22 organismos que nos controlan. Así fue que presentamos formalmente la solicitud para la emisión de dicha nota que finalmente llegó recientemente con la firma de la Mg. Paula Pellegrini, actual directora.

El resultado de esta gestión es un éxito. Los controles que debemos cumplir son los mismos, pero, gracias a la nota publicada, se encuadra con claridad el ámbito de fiscalización de un organismo clave para la actividad aerosolista y se evita la presencia de librepensadores y la ocurrencia de futuros malentendidos.

A modo de cierre, quiero destacar que este fue un proceso en el que tuvimos que atravesar varios obstáculos y donde hubo intereses de todo tipo pero que también nos permitió ser respetados por las autoridades de la Secretaría como aerosolistas y renovar el compromiso de su representación. Es para resaltar que durante todas las presidencias que encabezaron UADA, este tema fue pilar fundamental de la gestión.

Este logro pone de manifiesto, una vez más, que, a un aerosolista, nadie los comprende mejor que otro aerosolista. Por eso, si la institución a la que pertenecemos es verdaderamente representativa de este enunciado, el beneficio será para todos.

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